sábado, 4 de diciembre de 2010

ESTAMOS PERDIENDO EL NORTE

Ni la huelga general del 29 S ni la de funcionarios, ni la del metro de Madrid, consiguieron paralizar al país como lo han hecho esta noche los controladores aéreos en unas cuantas horas. Hasta tal punto han conseguido hacer pupita al gobierno, que antes de las 23:00 h de anoche el vicepresidente del gobierno de España, Javier Pérez Rubalcaba, tomó una medida excepcional, militarizando el espacio aéreo español, los militares tienen el control, a mi esa frase me da escalofríos….no sé a vosotros.
Desde anoche las noticias de la televisión y los grandes periódicos de tirada nacional son unánimes en su información “desproporcionada huelga de controladores aéreos dejan en tierra a 200.000 pasajeros”.
Bueno vamos a ver por un lado hablan de huelga ilegal, por parte de los trabajadores. A mi esto no me queda muy claro, para empezar, la mayoría de la información nos viene por los medios de comunicación afines al gobierno y claro, de estos te puedes fiar bien poco. Parece ser que aquí hay un tema de incumplimiento de contrato por parte de la empresa aena en cuanto al número de horas que por ley los controladores no pueden sobrepasar. Desde principios de semana, están reuniéndose en asamblea permanente para dar una solución, ya que parece ser que todos han sobrepasado las horas permitida por ley. adjunto un enlace con más información sobre el tema https://www.usca.es/.
Por otro lado yo personalmente veo a trabajadores luchando por sus derechos, España está en un punto sin retorno, una crisis económica sin precedentes donde el gobierno un día sí y otro también acomete contra los derechos de los trabajadores. Primero fue el recorte de los sueldos de los funcionarios, pero nadie les apoyo porque “son unos vagos que viven muy bien con su puesto fijo”, después fue la reforma laboral contra la que se intento luchar con una huelga general que no consiguió nada, ahora es la supresión de las ayudas de 450 euros a los parados de larga duración y la privatización de aenna de la que ningún medio está informando adecuadamente, ya que se están centrando en la implicación que esta lucha está teniendo en aquellas personas que se han visto obligados a cancelar sus viajes.
Vamos a ver, todas las huelgas nos afectan, pues claro, de eso se trata, de hacer presión, las de controladores, las del metro, las de taxistas, las de los trabajadores de la basura, es la única arma que tenemos los trabajadores para luchar contra la represión del gobierno.
200.000 personas no van a poder disfrutar del puente de la Inmaculada, es una pena y lo siento por ellos, vaya yo tampoco puedo, vamos yo ni siquiera me lo puedo plantear trabajando cuatro meses al año, pero en fin viajar hoy en día es un lujo y el que se lo pueda permitir es un privilegiado y la verdad, puestos a elegir entre privilegiados, me quedo apoyando al privilegiado con un pedazo de sueldo que lucha por sus derechos contra un gobierno neoliberal que al privilegiado que se queda sin sus vacaciones.
Aquí lo que hace falta es una unión entre trabajadores, pero en España la envidia es muy grande y la individualidad también, mientras que no me afecte a mi no me muevo, ande yo caliente y ríase la gente. A este no le apoyo porque tiene un sueldo muy alto comparado con el mío, a este tampoco por que tiene una plaza fija para toda la vida y así nos va a los españoles.
España es diferente, no es muy normal que las noticias se centren en la desgracia de 200.000 viajeros que se quedan en tierra, me parece una nimiedad comparada con la desgracia de más de un millón y medio de personas en España que pasan hambre (en el mundo son, 850 millones), y la desgracia de más de 4 millones de parados que hay en España, de los cuales 900.000 van a dejar de cobrar la ayuda y seguramente engrosaran la lista de los que pasan hambre.
Seguramente me acusarán de demagoga pero creo que es importante priorizar y unas vacaciones es un lujo mientras que comer es una necesidad. Centrémonos, los trabajadores y parados debemos de unirnos sin tirarnos piedras unos a otros aunque sólo sea por la incertidumbre de no saber si mañana te va a tocar a ti y cuando eso ocurra quien va a quedar para ayudarte.


Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas,
guardé silencio,
porque yo no era comunista,

Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio,
porque yo no era socialdemócrata,

Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
no protesté,
porque yo no era sindicalista,

Cuando vinieron a llevarse a los judíos,
no protesté,
porque yo no era judío,


Cuando vinieron a buscarme,
no había nadie más que pudiera protestar.

Martin Niemoeller. (Atribuido a Bertolt Brecht).